La cita de este miércoles en San Sebastián adquiere un carácter fundamental para la SD Huesca después de la derrota sufrida en el Carlos Belmonte contra el Albacete. La necesidad de ganar es doble para el conjunto azulgrana: por un lado asentarse en una zona tranquila de la clasificación, y por otro lado recuperar la confianza perdida lejos de El Alcoraz.

El duro revés sufrido en Albacete, con esos seis fatídicos minutos que condenaron al equipo de Guilló, obliga todavía más a salir victorioso de Anoeta a mediados de esta semana. A pesar de haber realizado una gran primera mitad, posiblemente la mejor que se le ha visto lejos de casa este curso, el inicio del segundo tiempo por parte de los azulgranas tiró por tierra todo lo hecho con anterioridad. Una circunstancia que, sin lugar a du

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