Lázaro Francisco Luria, exalcalde suplente de Chinameca, Veracruz, fue encontrado sin vida tras haber sido secuestrado. Su cuerpo fue hallado entre sembradíos de maíz, a un costado de la carretera que conecta Oteapan con Zaragoza. Este trágico descubrimiento se realizó la mañana del miércoles, tres días después de su secuestro. Los informes iniciales indican que el cuerpo de Luria presentaba evidentes signos de violencia. Su cuello había sido cortado con un arma blanca, lo que se considera la causa de su muerte. Las autoridades fueron alertadas por vecinos de la zona, quienes reportaron la presencia del cadáver. Lázaro Francisco Luria había sido privado de la libertad durante el fin de semana anterior. Sus captores se comunicaron con la familia para exigir un rescate a cambio de su liberación. Aunque se presume que la familia accedió a pagar el rescate, los delincuentes, tras recibir el dinero, lo asesinaron y abandonaron su cuerpo. El exalcalde asumió el cargo en 2012, tras la destitución de Martín Padua Zúñiga, quien fue arrestado por presuntos vínculos con la organización criminal Los Zetas. Luria ocupó el puesto hasta 2013 y, desde entonces, no volvió a participar en la política. Este asesinato se suma a la creciente lista de exfuncionarios que han sido víctimas de la violencia en México, un país donde ser político local se ha vuelto extremadamente peligroso. Las autoridades han iniciado una investigación para esclarecer los hechos y dar con los responsables de este crimen.