La joven había desaparecido en 1990 y cinco años más tarde, justamente cuando se desvelaba también que habían sido encontrados los restos de una mujer de entre 20 y 24 años enterrados en cal viva en Barros, Langreo, la madre denunciaba ante la Guardia Civil su desaparición. En aquel momento la técnica de ADN utilizada, en este caso por la Policía Nacional que se encargó de la investigación, no pudo concluir quién era la chica asesinada por 'Garrincha' , pero treinta años más tarde, con nuevos sistemas de identificación, ha llegado la confirmación, se trataba de aquella avilesina que a finales de 1990 se había ido dejando a su hija de cinco años con su madre. Había sido asesinada poco después, concretamente en la noche de Reyes de 1991.
Su asesinato se descubrió años más tarde. Según pub

El Comercio