En esta era digital la nueva generación de teléfonos inteligentes está marcando un punto de inflexión: ya no se trata solo de cámaras de alta gama o pantallas más nítidas, sino de verdaderas maquinas con inteligencia artificial (IA) capaces de anticiparse a las necesidades de cada usuario.

Como bien se sabe, principales fabricantes: Samsung, Huawei, Apple, Google, Xiaomi y Honor, entre otros, están integrando procesadores diseñados en especial para ejecutar tareas de IA directamente en el dispositivo, lo que permite que el teléfono reconozca objetos en imágenes, traduzca conversaciones en tiempo real o edite fotos automáticamente con resultados profesionales.

Por ejemplo, la serie Galaxy S25 ofrece imágenes sumamente detalladas a cualquier distancia con sensores de alta resolución y

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