Cartagena, enviada especial

Esta Cartagena con clima festivo que celebra otro aniversario de su independencia al estilo del carnaval con carrozas y su gente con disfraces y máscaras, parece inmune al clima político de Colombia. En estos días está marcado por una serie de enfrentamientos verbales que involucran al presidente Gustavo Petro y a los expresidentes Álvaro Uribe y Andrés Pastrana, en torno a denuncias cruzadas. Nada que sorprenda en Argentina.

Pero en el centro de convenciones de Cartagena lo que se discute es la decisión de Petro de defender una industria icónica como la automotriz. Decidió subir al 35% los aranceles a la importación de vehículos a gasolina o a diesel. Una medida que tiene como destinatario a los made in China.

Las automotrices se consideran un emblema en

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