Baltimore— Los obispos católicos romanos de Estados Unidos emitieron una declaración inusual el miércoles en apoyo a los inmigrantes, su acción colectiva más contundente hasta el momento que reprende la campaña agresiva de deportación de la administración Trump.

La declaración, que pasó en una votación casi unánime en la conferencia anual de los obispos en Baltimore, no mencionó al presidente Donald Trump, o a ningún político, por su nombre. Pero amonestó muchas de las tácticas de la administración y presentó un argumento moral unido de que la Iglesia católica en Estados Unidos objeta en los términos más fuertes las acciones de la administración.

“Nosotros como obispos católicos amamos a nuestro país y rezamos por su paz y prosperidad”, decía la declaración. “Por esta misma razón, nos se

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