Una estatua de 3,6 metros que muestra al presidente estadounidense, Donald Trump, y al fallecido delincuente sexual Jeffrey Epstein tomados de la mano volvió a aparecer este jueves en Washington, un día después de la polémica por los 20.000 documentos publicados por el Congreso, donde Epstein asegura que el mandatario sabía de sus crímenes y que pasó "horas" con una de las víctimas.

Después de haber sido r etirada dos veces por las autoridades federales de la capital estadounidense, la obra, creada por el colectivo artístico The Secret Handshake, fue ubicada frente al restaurante Busboys and Poets, en el corredor de la calle U. La reaparición coincide con el renovado escrutinio sobre los vínculos entre Trump y Epstein, tras la publicación por parte del Comité de Supervisión de la Cáma

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