Noruega originó una asombrosa propuesta para la movilidad “inteligente” e impedir la contaminación en las rutas de su país, precisamente en la localidad de Trondheim. Una serie de bobinas de cobre instaladas bajo el asfalto, generan un campo magnético y transfieren energía por medio de una carga inalámbrica a los autos eléctricos mientras se encuentran en circulación. La instalación está diseñada para resistir las condiciones extremas como nieve, hielo y humedad.
El proyecto piloto tiene apenas cien metros de extensión y los ingenieros locales aspiran a poder aplicar la tecnología a gran escala. Una de las grandes pruebas a sortear, será si el sistema podrá tolerar la circulación de vehículos de mayor porte.
En 2024, el 88,9% de los autos 0 Kilómetro que se vendieron en suelo

Perfil
The Texas Tribune Crime
People Top Story
ABC News Video
The Rink Live
Raw Story
Associated Press US News
FOX 13 Tampa Bay Crime
FOX 5 Atlanta Crime
Mediaite
AlterNet