Amy Schumer sorprendió hace una semana mostrando su nueva imagen con casi 20 kilos menos. «Me gusta cómo me veo, pero al final, lo esencial es cómo te sientes», dijo, subrayando que su pérdida de peso se debía fundamentalmente a la búsqueda de una mejora en su salud. «Siempre he estado orgullosa de mi aspecto», escribió. «He estado trabajando para estar libre de dolor y finalmente lo estoy. Mi endometriosis está mejor. Mi espalda se está curando. Ya no tengo el síndrome de Cushing, así que mi rostro volvió a la normalidad», describió.

Por eso, cuando la actriz estadounidense ha borrado sus fotografías de Instagram anteriores a su cambio físico, muchos de sus seguidores le han reprochado que reniegue de su imagen de antes. Algo que ella ha negado: «Me siento bien y feliz. ¡Borré mis fotos

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