Las personas egocéntricas tienen una serie de rasgos comunes según la psicología , podrías ser una de ellas. Será la psicología la que dictamine las distintas formas en las que las personas se manifiestan. No es lo mismo lo que uno cree de sí mismo que lo que ven los demás, ese espejo que usamos para vernos en él, puede estar determinado por algunos cambios destacados que pueden llegar en cualquier momento. Es hora de saber en todo momento qué podemos esperar de ese carácter que nos dicen que podemos tener, pero quizás no vemos.

Podrás ser una de esas personas egocéntricas que quizás hasta ahora no veías o sólo veías en los demás. A lo largo de la vida nos damos cuenta de cómo somos o de cómo seremos, de cómo respondemos ante una serie de elementos que pueden acabar generando más de una sorpresa del todo inesperada en estos días que tenemos por delante. Sin duda alguna, tocará estar pendientes de algunos cambios que serán los que marcarán estos días que tenemos por delante. Podrás ser una de esas personas egocéntricas que quizás hasta ahora sólo habías visto desde fuera.

Podrías ser una de ellas

La realidad es que lo que somos y lo que podemos ser, o tal como nos vemos o nos ven los demás, puede acabar siendo la antesala de algo más. Con algunas novedades que pueden ser las que nos afectarán de lleno en estos días en los que todo puede cambiar.

Reconocerse a uno mismo, no sólo es verse en el espejo de la manera que queremos vernos, sino que va un paso más allá. Podremos empezar a ver llegar algunos cambios que, sin duda alguna, acabarán siendo los que nos marcarán muy de cerca.

Hay maneras de entender el mundo y de entenderse a uno mismo. El ego es un gran enemigo que puede materializarse de muchas formas distintas. Con la mirada puesta a una serie de situaciones que podemos empezar a ver llegar de una forma diferente.

Es hora de reconocer en primera persona este tipo de elementos que pueden acabar generando más de una sorpresa del todo inesperada. Ese egocentrismo que vemos en los demás, puede estar también en nosotros mismos, de una manera muy diferente. Los psicólogos saben muy bien las forma de identificar a una persona egocéntrica.

Estos son los rasgos de una personalidad egocéntrica

Una personalidad egocéntrica puede ser algo que tengamos más en mente de lo que nos imaginaríamos. Tenemos por delante una serie de rasgos que podemos compartir y que nos identifican con estos expertos que, sin duda alguna, deberemos tener en consideración.

Tal y como definen una personalidad egocéntrica los especialistas del blog de agspsicologosmadrid: «Ser egocéntrico implica mirar el mundo desde una sola perspectiva: la propia. Quien es egocéntrico se considera el centro de todo, resta importancia a las opiniones ajenas y tiende a sobrevalorar sus intereses y su personalidad, mostrando dificultades para comprender y aceptar las visiones de los demás. El egocentrismo es una tendencia psicológica en la que una persona ve el mundo únicamente desde su propia perspectiva, mostrando poca capacidad para considerar los puntos de vista o emociones de los demás. Comprender el egocentrismo ayuda a identificar patrones de pensamiento que afectan las relaciones personales y el desarrollo emocional. Esta actitud puede manifestarse en situaciones cotidianas y a menudo impacta en la comunicación y la empatía. Analizar las raíces y los efectos del egocentrismo permite reconocer cómo este rasgo se forma y persiste a lo largo del tiempo. Conociendo sus características principales, las personas pueden trabajar en modificar su comportamiento y fortalecer sus vínculos sociales».

Desde Selia nos dan en su blog las 6 señales de alarma que nos permitirán detectar a tiempo a una persona egocéntrica:

  1. Falta de empatía. Una de las características más destacadas de una persona egocéntrica es la dificultad para reconocer o comprender los sentimientos y necesidades de los demás. Esta falta de empatía puede llevar a comportamientos insensibles o desconsiderados, ya que la persona tiende a centrarse exclusivamente en su propia perspectiva y necesidades. Las personas egocéntricas suelen tener dificultades para ponerse en el lugar del otro y, por lo tanto, pueden mostrar indiferencia o incluso desprecio hacia las emociones ajenas.
  2. Necesidad constante de validación. Las personas con una personalidad egocéntrica suelen buscar constantemente la aprobación y el reconocimiento de los demás. Esta necesidad de validación externa puede manifestarse en la búsqueda de elogios, atención o admiración.

Estas personas suelen exagerar sus logros y habilidades para impresionar a los demás y obtener su aprobación.

  1. Sentimientos de superioridad. Una persona egocéntrica tiende a verse a sí misma como superior a los demás. Puede creer que posee talentos, habilidades o conocimientos especiales que la hacen única o más valiosa que los demás. Esta sensación de superioridad puede llevar a la persona a despreciar o menospreciar a quienes considera inferiores .
  2. Dificultad para aceptar críticas. Las personas egocéntricas suelen ser muy sensibles a las críticas y pueden reaccionar de manera defensiva o agresiva cuando se les señala algún error o defecto. Esta dificultad para aceptar la retroalimentación puede dificultar su crecimiento personal y la mejora de sus relaciones interpersonales. Estas personas tienden a interpretar las críticas como ataques personales y, por lo tanto, las rechazan o las minimizan.
  3. Manipulación emocional. Las personas con una personalidad egocéntrica pueden utilizar tácticas de manipulación emocional para obtener lo que desean o para controlar a los demás. Estas tácticas pueden incluir el chantaje emocional, la culpabilización o la victimización.

Estas personas suelen utilizar a los demás como medios para alcanzar sus propios fines, sin considerar las necesidades o deseos de los otros .

  1. Envidia y competencia. Una persona egocéntrica puede sentir envidia de los logros o éxitos de los demás y competir constantemente para demostrar su superioridad. Esta necesidad de compararse con los demás puede generar tensiones y conflictos en las relaciones interpersonales.