La señora Virginia Méndez alzó su voz de protesta frente al mal funcionamiento del sistema de transporte público, conocido como MÍO. Asegura que las demoras son constantes, con intervalos de hasta 15 o 20 minutos entre ruta y ruta, lo que complica la movilidad de los caleños. “Si no fuera por la demora, llegaría temprano a mi trabajo”, expresó, haciendo un llamado a las autoridades para tomar medidas reales.

Méndez criticó además la gestión del alcalde Alejandro Eder, a quien señaló de hablar mucho, pero ejecutar poco. Según la ciudadana, las promesas de transformación en movilidad no se reflejan en la realidad. Los usuarios continúan enfrentando largas esperas, recorridos ineficientes y falta de coordinación en las rutas. El malestar aumenta en distintos sectores de la capital vallecauca

See Full Page