El dengue sigue siendo una amenaza latente en toda la región, entendida esta en su más amplia dimensión continental: desde Centroamérica y el Caribe hasta la Argentina, todos los países sufren el impacto del Aedes aegypti, el mosquito trasmisor del virus.

La lucha contra este verdadero flagelo sanitario es constante en muchas partes desde hace varios años; sin embargo, persisten situaciones que conspiran contra la eficacia de los planes preventivos. Por ejemplo, y sin ir más lejos, la actitud de algunos formoseños/as cuando los visitan las brigadas de fumigación.

No son todos, por supuesto, pero es frecuente observar cómo estas personas les cierran la puerta en la cara a los fumigadores, no los atienden o eligen ausentarse de sus domicilios cuando saben que andan cerca. Esto representa u

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