Si algo domina Estados Unidos como nadie es el arte de convertir cualquier pausa deportiva en un espectáculo memorable. Y el Bernabéu, que ya venía encendido por el ambiente del Madrid Game entre Miami Dolphins y Washington Commanders, ha terminado de venirse arriba cuando ha llegado el descanso y se han apagado las luces. Era el momento del halftime show .

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En unos segundos, el estadio se ha transformado en un escenario gigantesco: Bizarrap ha emergido entre haces de luz, acompañado nada menos que por Daddy Yankee, provocando un estallido de euforia que recorrió las gradas como una ola. El productor argentino abrió el show con la BZRP Music Sessions, Vol.

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