Por Eduardo S. Leguizamón , ex Investigador INTA, ex profesor UNR y ex Investigador CONICET
La agricultura del siglo XXI enfrenta un doble imperativo: aumentar la producción para una población creciente y, al mismo tiempo, preservar y restaurar los servicios ecosistémicos que sustentan la fertilidad y la resiliencia de los agroecosistemas. La Agricultura de Paisajes propone una mirada supra-parcelaria, que integra el manejo de bordes de campo, cultivos mixtos y de cobertura, corredores biológicos e islas de vegetación nativa, junto con la restauración del bioma del suelo —incluyendo, cuando sea pertinente, el mapeo de su ADN— para potenciar la polinización, el control biológico y la salud edáfica.
Un modelo alternativo al paradigma dominante
Esta propuesta contrasta con el modelo pre

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