Una extensa nube de polvo, originada en la Patagonia, ha activado alertas en la provincia de Buenos Aires y el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Este fenómeno se debe a vientos que superaron los 150 km/h en la región patagónica, provocando daños en Chubut y Santa Cruz. Las ráfagas extremas levantaron polvo y sedimentos secos, que se desplazaron hacia el centro del país, afectando especialmente a localidades costeras como Mar del Plata, Necochea y Tandil.
El fenómeno comenzó el lunes, cuando las ráfagas intensas impulsaron arena y polvo desde los suelos patagónicos. En la madrugada y mañana del martes, varias ciudades bonaerenses experimentaron cielos opacos y una notable reducción de visibilidad, con efectos visibles que incluyeron una disminución de la visibilidad a menos de 5 kilómetros y sedimentos sobre vehículos y superficies. Imágenes satelitales del Centro de Investigación de la Atmósfera Remota (CIRA) muestran claramente el avance de la nube de polvo en tonos amarillos.
El viento del sur a sudoeste actúa como un corredor que transporta material desde la Patagonia hacia la franja central, afectando especialmente a las urbes costeras. Residentes de Bahía Blanca informaron que el cielo adquirió un tono sepia debido a la presencia de polvo. En Mar del Plata, la capa de partículas se hizo visible sobre las superficies a media mañana.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) mantiene un nivel de alerta por vientos intensos, con ráfagas que pueden alcanzar hasta 75 km/h. Las autoridades advierten sobre la posible afectación de la calidad del aire, especialmente para personas con alergias o condiciones respiratorias. Se recomienda a la población cerrar ventanas, evitar actividades al aire libre y tener a mano una mochila de emergencia ante posibles complicaciones.
Además, el avance de la nube de polvo se combina con humo de incendios forestales en la Patagonia. Imágenes satelitales muestran un manto difuso que cubre la región central, junto con plumas de humo. Este fenómeno es resultado de una configuración meteorológica excepcional, con una profunda baja presión sobre el océano y un sistema de alta presión sobre la Patagonia, generando vientos muy intensos que no se habían registrado en años.
Se prevé que el viento pierda fuerza hacia la noche, descendiendo a menos de 45 km/h, aunque la alerta amarilla por vientos permanecerá activa hasta las últimas horas del día. Las autoridades continúan vigilando el comportamiento del viento y el eventual arribo de la nube de polvo a la ciudad y sus alrededores.

Noticias de Argentina

Infobae
Diario Popular
La Nación
New York Daily News Snyde
5 On Your Side Sports
AlterNet
Roll Call
People Top Story
The Daily Beast