El dragado de la dársena cuatro y el canal de navegación de Ciudad del Carmen se ha retrasado más de una década, afectando gravemente la logística y la competitividad del puerto. Gonzalo Hernández Pérez, presidente del Clúster de Energía de Campeche, afirmó que esta situación ha impactado los costos operativos y la capacidad del puerto para competir con otros en el país. La llegada reciente de una de las tres dragas anunciadas ha generado expectativas, pero Hernández Pérez advirtió que no será suficiente para recuperar la actividad que el puerto tuvo hasta 2018, cuando se registraron más de 22 mil arribos anuales. Desde entonces, la falta de mantenimiento ha reducido el calado del canal de navegación, que tiene 18 kilómetros de longitud y 60 metros de ancho. El líder empresarial recordó que, en el pasado, las navieras podían realizar hasta tres viajes diarios para abastecer plataformas y transportar personal. Actualmente, muchas embarcaciones deben hacer hasta ocho trayectos, lo que incrementa los costos de diésel y los tiempos de traslado. Hernández Pérez también señaló que la falta de dragado ha llevado a una migración de empresas hacia puertos como Dos Bocas y Coatzacoalcos, que cuentan con procesos de modernización constante. Esto ha resultado en una caída de actividad, con solo 12 mil arribos actuales, casi la mitad de lo que se registró en los años de mayor bonanza. A pesar de la importancia estratégica del puerto de Ciudad del Carmen, ubicado a solo 90 kilómetros de los complejos petroleros Cantarell y Ku-Maloob-Zaap, ha habido un desinterés evidente en invertir en infraestructura y modernización. El Clúster de Energía advierte que una sola draga no resolverá el problema. Hernández Pérez insistió en la necesidad de un programa permanente de dragado y una inversión seria para modernizar muelles e instalaciones. "La naturaleza va a seguir azolvando el canal; si no se mantiene de forma constante, todo lo que se haga ahora se perderá en poco tiempo", advirtió. Además, subrayó que no basta con anunciar obras tras años de retrasos, ya que el problema estructural ha llevado a Ciudad del Carmen a perder competitividad frente a otros puertos que ahora captan mayor carga y tráfico logístico. Finalmente, lamentó que, aunque el dragado representa un avance, llega en un contexto de crisis económica en la isla desde 2023. No hay claridad sobre si los trabajos serán suficientes para devolver al puerto su relevancia logística. "Se necesita saber cuánto se debe dragar, dónde y durante cuánto tiempo, y tener especialistas dirigiendo el proceso; sin inversiones reales y permanentes, no hay garantía de recuperación", concluyó.