Nicole Kidman , a sus 58 años y con una altura de 1,80 m, sigue destacándose por sus piernas largas y tonificadas , que llaman la atención tanto en la pantalla como fuera de ella. La actriz australiana atribuye este logro a un enfoque constante en fuerza, movilidad y estabilidad, combinando ejercicio regular con hábitos saludables de alimentación y bienestar general.
Su entrenamiento no busca únicamente la estética: prioriza la prevención de lesiones, la mejora de la postura y la salud integral a lo largo del tiempo. La combinación de fuerza y movilidad le permite mantener un cuerpo funcional, preparado para la vida diaria y exigencias profesionales.
Además de sus rutinas en casa, Nicole incorpora actividades al aire libre, como correr y nadar, que potencian la resistencia car

Clarín

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