La expresidenta de Perú, Dina Boluarte, ha iniciado el proceso para recibir una pensión vitalicia tras su vacancia por incapacidad moral. Diez días después de ser destituida, Boluarte envió un documento al presidente del Congreso, Fernando Rospigliosi, solicitando el pago de su pensión correspondiente a los dos años y 10 meses que estuvo en el cargo.

En su carta, Boluarte pide que se le otorgue la pensión establecida en la Ley 26519, que oscila entre 15.600 y 35.000 soles mensuales. Además, ha solicitado beneficios logísticos y de personal, según el Acuerdo de Mesa N° 078-2016-2017/MESA-CR2. Esto incluye un vehículo oficial de por vida para su uso personal, 150 galones de gasolina al mes, personal de seguridad del Estado y un asesor contratado bajo modalidad CAS, con un salario de 3.700 soles mensuales.

Martín Cabrera, especialista en gestión pública, explicó que Boluarte puede recibir esta pensión a pesar de su vacancia, siempre y cuando no haya una acusación constitucional aprobada por el Congreso. “No en tanto no haya una acusación constitucional aprobada por el Congreso”, afirmó Cabrera.

Cabe destacar que, tres meses antes de dejar el cargo, Boluarte logró un aumento salarial significativo, pasando de 15.600 a 35.568 soles mensuales. Este incremento podría influir en el monto de la pensión que ahora reclama, aunque la decisión final sobre el monto corresponde al Congreso.

Además de su pensión, Boluarte ha solicitado al RENIEC gratificaciones y beneficios sindicales por un total de 428.905 soles, aunque un fallo judicial determinó que solo le correspondían 239.000 soles. Su defensa legal en diversos procesos fiscales sigue siendo financiada con recursos públicos.

A pesar de la controversia que rodea su gestión, Boluarte ha manifestado que se siente en paz consigo misma. “Me voy tranquila y me voy en paz y que viva el Perú”, declaró tras su salida del cargo. A sus 63 años, espera que el Congreso decida sobre su pensión mensual y los beneficios vitalicios que reclama, los cuales serían financiados con fondos públicos.