Según los expertos, hay un método científico para identificar la propia paleta de colores personal, y aprender a elegir los matices que realzan lo mejor de cada uno. El nombre de esta “ciencia” es armocromía, es decir, armonización de los colores.
Esto permite elegir ropa, accesorios y maquillaje, evitando errores y potenciando los encantos.
Además del color, se determina el subtono (cálido o frío), el valor (claro y oscuro) y se presta atención al contraste.
Con el correr de los años, el rostro cambia y los colores que favorecían de jóvenes, pueden no ser los más apropiados. Alí reside la importancia de armonizar los colores del look con los tonos de la piel y el cabello.
Actualmente, las personas de 60 años en adelante siguen siendo activas tanto social como laboralmente ,

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