La conversación telefónica que Donald Trump y Vladímir Putin mantuvieron en octubre convenció al presidente estadounidense de no suministrar a Ucrania misiles de largo alcance Tomahawk, reporta  The Wall Street Journal , citando a sus fuentes. 

Aunque Trump había expresado anteriormente su preocupación por la disminución del inventario estadounidense de misiles, la conversación con Putin lo convenció de no apoyar la entrega de Tomahawks a Ucrania , explicó un funcionario estadounidense, citado por el periódico.

Respuesta rotunda

A principios de este mes, Trump fue preguntado por un periodista si planeaba suministrar a Ucrania estos misiles de largo alcance. " No, la verdad es que no ", contestó el líder republicano, descartando así enviar Tomahawks a Kiev en un futuro próximo. No obstante, indicó que podía cambiar de opinión.

Desde Rusia han declarado en repetidas ocasiones que  no existe un " arma mágica "  que pueda cambiar el rumbo del conflicto ucraniano. Asimismo, el canciller ruso, Serguéi Lavrov,  advirtió  que la entrega de Tomahawks "simplemente infligiría un  daño colosal  a las perspectivas para normalizar las relaciones entre Rusia y EE.UU. y para  abandonar el callejón sin salida absoluto  al que la Administración Biden llevó estas relaciones".