La madre de la estudiante de secundaria Kimberly Marisol Sánchez Merino, de 14 años de edad, se metió a las instalaciones del Servicio Médico Forense (Semefo), y tras observar un cadáver, dijo tener la certeza de que se trata de su hija.

La corazonada se afianzó por la dentadura, un pantalón y tenis que llevaba su hija, estudiante de primer año de la secundaria técnica 30, cuando desapareció el pasado 1 de noviembre, cerca del cuartel de la policía de Chilpancingo.

"Yo estoy muy preocupada y angustiada por no saber nada de ella", dijo la mamá entrevistada afuera de estas instalaciones pertenecientes a la Fiscalía General del Estado (FGE).

Señaló que acudió al Semefo porque le dijeron que había un cuerpo que se encontró en la comunidad de El Huiteco, y que tiene las características de su

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