En una Costa Atlántica donde los balnearios tradicionales suelen concentrar la demanda, surge un destino que redefine la idea de descanso: Dunamar, un barrio parque ubicado en el partido de Tres Arroyos que está empezando a competir seriamente con enclaves consolidados como Cariló y Mar de las Pampas. Su fórmula es simple: naturaleza en estado puro, silencio, amplitud y una playa que todavía se mantiene prácticamente virgen.

Este rincón bonaerense funciona como un microclima dentro del mapa turístico. Dunamar está rodeado por un bosque inmenso y protegido por médanos gigantes que amortiguan el viento y regalan postales casi cinematográficas. Su paisaje actual —700 hectáreas de pinos, álamos y acacias— es el resultado de un proyecto de forestación iniciado a mediados del siglo XX, cuando l

See Full Page