Las tabletas se han convertido en uno de los dispositivos más versátiles y prácticos de la vida moderna. Desde trabajo remoto hasta entretenimiento y diseño, su evolución ha transformado la forma en que millones de personas estudian, crean y se conectan. Lo que comenzó en 1989 con un modelo de dos kilos operado con un lápiz óptico, tomó verdadera fuerza en 2010 con el lanzamiento de la primera tableta moderna, que abrió el camino a una nueva era de movilidad digital.

Hoy, estas pantallas portátiles son piezas clave para nómadas digitales, estudiantes, ejecutivos y creativos. Gracias a ellas es posible asistir a reuniones desde cualquier lugar, tomar notas en la nube o convertir una habitación en una sala de cine improvisada. Este crecimiento se refleja en cifras: según Statista, para es

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