Avianca ha activado un plan de protección para sus pasajeros debido a la actualización urgente de software solicitada por Airbus para la flota de aviones A320. Esta situación ha llevado a la aerolínea a dejar en tierra el 70% de su flota, lo que generará "disrupciones significativas" en sus operaciones. La compañía ha cancelado las ventas de boletos hasta el 8 de diciembre para gestionar mejor la reacomodación de los pasajeros afectados. La aerolínea ha informado que su equipo técnico está trabajando para realizar las modificaciones necesarias en el menor tiempo posible. "Todos los esfuerzos de nuestro equipo están concentrados en realizar las modificaciones requeridas en el menor tiempo posible y en brindar alternativas a nuestros clientes para minimizar el impacto en sus planes de viaje", afirmó un portavoz de Avianca. Los pasajeros cuyos vuelos se vean afectados tendrán varias opciones. Avianca ofrecerá reacomodación en vuelos disponibles, ya sea en su propia operación o en aerolíneas asociadas. También podrán reprogramar sus vuelos sin penalización ni diferencia tarifaria, con la posibilidad de volar hasta 180 días después de la fecha original. Además, quienes prefieran no viajar podrán solicitar el reembolso de los trayectos no utilizados a través de la página web, el Contact Center, puntos de venta directos o agencias de viajes. La aerolínea ha recomendado a los pasajeros revisar las comunicaciones enviadas al correo electrónico asociado a la reserva y consultar el estado de sus vuelos. También se aconseja no acudir a los aeropuertos si el vuelo no está confirmado. La actualización de software fue ordenada por Airbus tras detectar un incidente en un programa de control de vuelo del modelo A320, relacionado con la exposición a rayos solares. Se estima que cerca de 6,000 aviones en todo el mundo se verán afectados. Aunque el 85% de los aviones solo requerirá un pequeño cambio de software, el 15% restante necesitará intervenciones más complejas, lo que podría prolongar el tiempo de inactividad. La Aeronáutica Civil ha confirmado que esta actualización es una medida preventiva y obligatoria para garantizar los más altos estándares de seguridad en las operaciones aéreas.