Málaga no da crédito. En tan solo siete días la provincia sureña ha sido testigo varias tragedias que han sacudido su geografía. Un asesinato machista en Rincón de la Victoria, otro en Campillos; una familia marroquí que ha muerto intoxicada en Torrox, un bebé que estuvo a punto de ser vendido en la capital o un hombre degollado en Yunquera han sido el saldo de una semana negra.

Todo comenzó el pasado sábado, cuando un hombre de 61 años fue detenido como el presunto autor del asesinato de su expareja, de 60. Las alarmas saltaron sobre las 10.20 horas, cuando los vecinos alertaron de una discusión en una vivienda de la urbanización Cotomar, en Rincón de la Victoria.

Hasta allí se trasladaron las autoridades, que se encontraron a la mujer sin vida. Había sido apuñalada con un arma blanca,

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