Al menos tres personas han muerto y otras 27, incluido un niño, han resultado heridas en un nuevo bombardeo ruso en la madrugada del sábado contra infraestructuras energéticas de Kiev, según informaron las autoridades de la capital de Ucrania.

“27 personas resultaron heridas en el ataque nocturno del enemigo contra la capital. 17 de ellas, incluido un niño, han sido hospitalizadas por los servicios médicos. Dos personas murieron”, escribió en su cuenta de Telegram, Vitali Klichkó, el alcalde de la ciudad. Más tarde, el propio presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha confirmado un tercer fallecimiento.

Los ataques rusos contra la infraestructura energética, a tres semanas del inicio del invierno, han provocado cortes de luz en varios distritos de la capital ucraniana.

El diario Kyiv Independent informaba a primera hora de que las primeras sirenas aéreas se activaron en toda Ucrania desde el arranque de la madrugada, cuando Rusia lanzó decenas de misiles y cientos de drones hacia la capital. Zelenski ha asegurado que fueron un total de 36 misiles y más de 600 drones.

Un segundo ataque se produjo sobre las 07.00 de la mañana, hora local, cuando, según este diario, las fuerzas rusas volvieron a lanzar decenas de misiles, incluidos misiles hipersónicos Kinzhal, hacia la capital, que dañaron varios distritos y afectaron a varios edificios residenciales, sobre todo en las plantas más altas. Al menos seis edificios de apartamentos de Kiev han sufrido incendios provocados por el ataque.

“Los principales objetivos fueron infraestructura energética e inmuebles civiles”, explicó el jefe de Estado ucraniano. “En Kiev y sus alrededores, nuestros servicios de emergencia están trabajando sobre los lugares del ataque ruso”, señala Zelenski en un mensaje, donde hizo hincapié en que su país necesita trabajar “sin perder ni un día para que haya suficientes misiles para los sistemas de defensa aérea”.

Además, el presidente ucraniano aprovechó para pedir a sus socios europeos que tomen una decisión sobre los activos rusos congelados en Europa si Moscú no cesa sus ataques con drones y misiles. “Y tenemos que halar con todos los socios sobre los pasos a dar para terminar esta guerra”, concluyó.

El ataque ruso de este sábado se produce en un momento en el que se intenta negociar el fin del conflicto , con la visita la próxima semana a Moscú de Steve Witkoff, el enviado especial del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, al tiempo que se espera en Kiev, en principio este fin de semana, a Dran Driscoll, también enviado por el presidente Trump.