La Policía Nacional ha arrestado al presunto agresor de dos activistas de Femen, quienes denunciaron haber sido víctimas de agresión sexual durante una protesta el 20 de noviembre en Madrid. Este acto se llevó a cabo frente a la parroquia de los Doce Apóstoles, donde se celebraba una misa en conmemoración del 50 aniversario de la muerte del dictador Francisco Franco.

Las activistas, que se presentaron desnudas de cintura para arriba, protestaban con gritos de "Fascismo legal, vergüenza nacional" y portaban pancartas. Durante la manifestación, un hombre se acercó a ellas y les tocó los pechos, un momento que fue capturado por los medios de comunicación presentes. Las activistas intentaron defenderse, pidiendo que no las tocaran, mientras que el agresor, que portaba una bandera preconstitucional, fue recriminado por otros asistentes a la misa.

La Delegación del Gobierno ha expresado su "compromiso firme" en la lucha contra la violencia sexual y ha reafirmado la importancia de garantizar el derecho a la manifestación sin coacciones ni agresiones. La ministra de Igualdad, Ana Redondo, también se pronunció sobre el incidente, cuestionando cómo alguien puede sentirse tan impune como para agredir a dos mujeres en público. Redondo subrayó que la sociedad española no tolera el abuso hacia las mujeres ni la admiración por dictadores, afirmando que "han pasado 50 años y hay quien no ha aprendido nada".

Las activistas, tras el incidente, abandonaron la zona por su propio pie, y la detención del presunto agresor se produjo al día siguiente de la protesta, en un contexto de creciente preocupación por la violencia de género en el país.