El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, convocó a intendentes, legisladores y funcionarios en La Plata para solicitar la aprobación de la Ley de Financiamiento, que aún está pendiente en la Legislatura bonaerense. Kicillof denunció una "asfixia financiera ilegal" por parte del gobierno nacional de Javier Milei, advirtiendo sobre el impacto negativo de la recesión y el recorte de fondos en la administración provincial. "La provincia de Buenos Aires enfrenta una situación excepcional", afirmó el gobernador.

La reunión se produjo casi un mes después de que Kicillof presentara un paquete de leyes económicas para 2026, de las cuales solo se aprobaron el Presupuesto y la Ley Impositiva. La Ley de Financiamiento, que permitiría tomar deuda y renovar obligaciones, sigue sin ser tratada. Kicillof destacó que la caída de la actividad económica ha afectado a todos los sectores, con una disminución del 5,7% en la actividad general, un 10% en la industria, un 25% en la construcción y un 8% en el comercio. Además, se han perdido 172.000 empleos y cerrado 5.000 empresas en la provincia.

El gobernador subrayó que la combinación de salarios deteriorados, aumentos tarifarios y el endeudamiento familiar ha incrementado la demanda sobre el sistema público. "La gente no puede pagar el mínimo de la tarjeta, no puede pagar la deuda", indicó. Kicillof también criticó la intermediación financiera, que, según él, ha distorsionado las estadísticas nacionales y evitado la declaración de recesión.

Kicillof centró su discurso en la acusación al gobierno nacional por la retención de fondos que, según él, están garantizados por ley. Mencionó que la provincia tiene una deuda acumulada con la Nación de 13 billones de pesos y que la caída de la recaudación, asociada a la recesión, suma otros 3,6 billones. A pesar de esta situación, el gobernador aseguró que la gestión provincial ha continuado con obras y programas esenciales, destacando que Buenos Aires es la provincia más austera del país.

El gobernador insistió en que el pedido de financiamiento no implica nueva deuda, sino que busca cubrir vencimientos y asegurar el funcionamiento de la provincia. Kicillof anunció que el 8% del total del financiamiento se destinará a los 135 municipios, garantizando un piso de aproximadamente 250.000 millones de pesos en cinco pagos fijos hasta junio de 2026.

Kicillof concluyó su discurso pidiendo a la Legislatura que vote la ley esta semana, enfatizando que es crucial para evitar más sufrimiento en la población y para el orden económico y social de la provincia. "No estamos dispuestos a afrontar los vencimientos de una deuda que no tomamos con recursos que se detraigan de salud o educación", afirmó, haciendo un llamado a los legisladores a apoyar la ley en favor de los 17 millones de bonaerenses.