La llegada constante de población extranjera se ha convertido en los últimos años en el seguro para que muchas ciudades se mantengan en una senda al alza en lo que a crecimiento de habitantes se refiere. Valladolid no es la excepción, ya que a lo largo de 2024 incorporó a su censo 1.982 vecinos hasta rozar los 302.000, lo cual solo fue posible gracias a las personas procedentes de países distintos a España.

La última actualización del censo publicada por el Instituto Nacional de Estadística no deja lugar a dudas: el impulso a la población de la capital del Pisuerga llega de fuera de las fronteras nacionales. Es más, de no ser por los extranjeros, la cifra de población se hubiera reducido ya que la ciudad perdió 233 vecinos españoles, y solo la entrada de 2.215 personas llegadas de otros p

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