El Congreso chileno ha aprobado un proyecto de ley que prohíbe el uso de teléfonos celulares y dispositivos móviles en todos los colegios del país. La decisión fue respaldada por 124 votos a favor y solo dos abstenciones en la Cámara de Diputados. Esta normativa busca fomentar la concentración y mejorar la convivencia escolar, y está lista para ser promulgada por el Gobierno. La ley establece que la prohibición se aplicará durante las actividades curriculares en las aulas, aunque incluye excepciones. Estas excepciones permiten el uso de dispositivos en casos de necesidades educativas especiales, emergencias, condiciones de salud diagnosticadas, o cuando el uso del dispositivo sea útil para la actividad curricular. También se contempla el uso por solicitud de los padres por razones de seguridad familiar. La normativa entrará en vigor al inicio del año escolar 2026. Los colegios tendrán hasta el 30 de junio de 2026 para adaptar sus reglamentos internos a esta nueva ley. En el caso de la educación media, se permitirá cierta flexibilidad, permitiendo a los establecimientos definir espacios y horarios específicos donde el uso de dispositivos móviles esté autorizado. El ministro de Educación, Nicolás Cataldo, destacó la importancia de esta ley, señalando que "viene a dar un paso significativo en algo que consideramos tremendamente relevante por el efecto pernicioso en nuestros niños y niñas, y nuestra juventud". Según el ministro, el uso descontrolado de celulares se ha convertido en una de las principales pandemias que afectan a los jóvenes, generando conductas problemáticas y adicciones. Con esta nueva legislación, el Congreso busca regular una preocupación creciente en el ámbito educativo, extendiendo la restricción a todos los miembros de la comunidad escolar, salvo en los casos expresamente autorizados.