El Gobierno de Donald Trump ha anunciado un plan de contingencia para Venezuela en caso de que Nicolás Maduro abandone el poder. Kingsley Wilson, jefa de prensa del secretario de Guerra de Estados Unidos, hizo esta afirmación durante una rueda de prensa en la Casa Blanca. "El Departamento tiene un plan de contingencia para todo. Somos una organización que planea. Si algo sucediera alrededor del mundo, tenemos una respuesta planeada y lista", declaró Wilson. La secretaria de prensa enfatizó que el enfoque del Departamento de Guerra está en combatir a los narcoterroristas en la región. "Cada barco que atacamos salvó las vidas de 25.000 americanos. Esa es una misión crucial para proteger la Tierra y estamos orgullosos de ser parte de ella", añadió. Por otro lado, Donald Trump Jr. reveló las condiciones que Maduro habría propuesto para dejar el país. Según Trump Jr., Maduro exigió mantener el control del ejército venezolano desde el exilio, lo que fue considerado inaceptable por la administración estadounidense. "Maduro, el líder del cartel, el que perdió las elecciones, mi padre le dio un ultimátum, sal de Venezuela o algo más sucederá", afirmó Trump Jr. Las exigencias de Maduro incluían la eliminación de sanciones impuestas por EE.UU., el cierre del caso ante la Corte Penal Internacional y el levantamiento de sanciones contra más de 100 funcionarios del régimen. La conversación entre Trump y Maduro, que tuvo lugar el 21 de noviembre, fue revelada recientemente. Durante la llamada, Maduro se mostró dispuesto a salir de Venezuela, pero bajo condiciones específicas, como la amnistía legal completa para él y su familia. El presidente Trump, sin embargo, rechazó la mayoría de las condiciones y le dio un ultimátum de una semana para abandonar el país. La llamada, que duró menos de 15 minutos, se enfrió rápidamente debido a la falta de puntos en común. La administración Trump ha intensificado la presión sobre Caracas, incluyendo un despliegue militar en el Caribe. Trump ha declarado que el espacio aéreo de Venezuela debe considerarse como "cerrado". La situación sigue en desarrollo, con la Casa Blanca evaluando sus próximos pasos respecto a Venezuela.