En realidad, a cualquiera podría sucederle: una sucesión de monólogos interminables de miembros del Gabinete del presidente de EEUU pronunciando loas al líder y repasando los éxitos de su gestión en los últimos meses. Uno detrás de otro, una mesa eterna, en la que Robert Kennedy Jr, Marco Rubio, Pete Hegseth, JD Vance y el resto hablan delante de las cámaras.
La sesión suele durar varias horas y, en la de este martes, la última antes de que acabe el año, la novena desde su vuelta al cargo, el presidente de EEUU, Donald Trump, que gusta de insultar al anterior presidente como sleepy Joe por su deterioro físico, ha ido sobreviviendo a los soliloquios de sus subordinados con visibles cabezadas.
No es la primera vez que le ocurre a Trump. Hace unas semanas, durante su encuentro con las farmacéuticas, tampoco podía evitar cerrar los ojos.
Fue durante el anuncio de un acuerdo para reducir el precio de medicamentos como Ozempic “para combatir la obesidad”. Durante su reunión con las farmacéuticas, fue sonado el desmayo de una de las personas que estaban de pie detrás de Trump.
A lo lago del vídeo se puede apreciar cómo Trump no puede evitar en varias ocasiones cerrar los ojos con la voz de fondo de su secretario de Salud y Servicios Humanos, Robert F. Kennedy Jr. Los pestañeos cada vez se alargan más conforme van avanzando los discursos.
Según el análisis del Washington Post , el presidente se pasó casi 20 minutos luchando por no dormirse durante el encuentro. En el caso de la reunión del gabinete de este martes, el tiempo ha debido ser parecido.

ElDiario.es Internacional
Noticias de España
ElDiario.es Economía
ElDiario.es Cultura
El Comercio
Raw Story
Slate Politics