Los sindicatos plantean el aumento más alto: 30.6%, lo que llevaría el salario diario a 362.34 pesos en la mayor parte del país, con el objetivo de mejorar la capacidad de las familias para cubrir gastos básicos. En contraste, gobierno y empresarios impulsan un ajuste más contenido, entre 11% y 12%, que dejaría el salario mínimo en 312.20 pesos, y en 470.20 pesos para la Zona Libre de la Frontera Norte, buscando evitar presiones inflacionarias.

Una tercera propuesta, impulsada por algunos senadores, sugiere que el salario cubra el equivalente a dos canastas básicas, lo que implicaría un aumento cercano al 17% y un monto cercano a 326.20 pesos diarios. Cualquiera de estas opciones tendría un impacto directo no solo en los ingresos de millones de trabajadores, sino también en prestaciones y

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