El pasado 29 de noviembre, el Pabellón Príncipe Felipe de Zaragoza se convirtió en el epicentro del boxeo español y europeo. Una velada muy especial, con dos combates profesionales de alto nivel que pusieron en disputa nada menos que cuatro títulos internacionales. Un momento histórico vivido en la ciudad aragonesa que llegó a acoger nada más y nada menos que 4000 asistentes.

El Príncipe Felipe volvió a latir

El Príncipe Felipe volvió a encender sus luces para una noche que quedó grabada en la memoria del boxeo aragonés. El pabellón, que supo ser escenario de grandes citas y que llevaba tiempo sin una velada de peso, recuperó su carácter de templo deportivo con un evento que ya genera nerviosismo, ilusión y una dosis inevitable de nostalgia. Quienes siguen este deporte en Zaragoza siente

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