La que fuera la última residencia del expresidente Adolfo Ruiz Cortines, hoy convertida en museo y legado para los veracruzanos, atraviesa un evidente estado de abandono.

En el inmueble que resguarda las pertenencias intactas del expresidente se puede apreciar a simple vista los 15 años de deterioro que ha sufrido ante la falta de mantenimiento.

La presidenta de la casa museo, Rosa María Jácome Hernández, recordó que el último trabajo importante se realizó durante la administración de Fidel Herrera, cuando se impermeabilizó el edificio.

Y es que, dijo, conforme han pasado las administraciones, tanto estatales como municipales, se han ido retirando los apoyos.

“Desde que estuvo Ramón Poo, no se ha recibido ningún apoyo. Ningún presidente municipal ha contribuido. Esta es la casa de los

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