Anunció a bombo y platillo que rompía su alianza parlamentaria con Pedro Sánchez y los incrédulos se cargaron de razón cuando días más tarde Puigdemont ordenaba a sus huestes madrileñas, siete exactamente, que votaran a favor de una iniciativa parlamentaria del Gobierno. Meses antes ya había dicho que no apoyaría proyectos de ley que fueran importantes para el Gobierno, y en el último minuto los convergentes votaron a favor. Eso explica el escepticismo ante el primer anuncio de ruptura de Puigdemont. Ahora, sin embargo, Sánchez está inquieto con Puigdemont. Por no decir angustiado. En plena crisis Ábalos, Koldo y Cerdán, con los dos primeros conducidos en un furgón a Soto de Real y haciendo declaraciones demoledoras para el sanchismo, el presidente del Gobierno organizó su agenda para empr
Sánchez y Puigdemont: entre pillos anda el juego
Málaga Hoy2 hrs ago
36


El Nacional.cat
El Día de La Rioja
Associated Press US News
AlterNet
Raw Story
The Conversation
The Daily Beast
The Tonight Show
America News
KCRG Sports
Bored Panda