Acaso sea la sensatez el mejor de los legados que le dejó Miguel Angel Russo a Claudio Úbeda , el ayudante de campo que quedó al mando de Boca tras el fallecimiento del director técnico. No hace locuras Úbeda y entiende a la perfección el lugar que debe ocupar. Por eso recibió elogios de los referentes Leandro Paredes y Edinson Cavani . Y esa manera de ser le indica los pasos a seguir y el refrán que dice "equipo que gana no se toca" ya es una fortaleza. Ocurre que Úbeda pondrá en la cancha a los mismo titulares que superaron a Talleres en los octavos de final y a Argentinos en cuartos.

Úbeda tuvo un noviembre soñado: ganó los cinco partidos que jugó, anotó nueve goles y solo le marcaron uno (Estudiantes en La Plata). Esas buenas estadísticas provocaron que las autoridades de

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