La historia del streaming dio este viernes un giro de guion épico y repleto de simbolismo. Netflix, la empresa que revolucionó el entretenimiento alquilando contenidos ajenos, ha decidido comprar la fábrica. En un movimiento que redefine el paisaje mediático, la plataforma anunció la adquisición de los estudios y activos de streaming de Warner Bros. Discovery por la astronómica cifra de 83.000 millones de dólares.

Netflix, el recién llegado digital, absorbe a uno de los estudios fundacionales de la meca del cine, la operación, descrita como un "matrimonio de dos pioneros", comprende un catálogo que es la memoria audiovisual de generaciones: desde El mago de Oz y Casablanca hasta Juego de Tronos, Friends y todo el universo de superhéroes de DC. Esta biblioteca de Alejandría de

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