La caída del árbol navideño de la Plaza de Armas de Coyhaique, ocurrida en medio de intensas ráfagas de viento, no debe ser vista solo como un incidente aislado, sino como una severa advertencia sobre la planificación y la gestión de los recursos públicos en nuestra comuna.
Si bien los funcionarios municipales han destacado con razón que "no hubo personas lesionadas producto de la ruptura del árbol" y que "la seguridad de las personas está primero", es ineludible analizar la magnitud de la tragedia que afortunadamente no ocurrió.
Una estructura de 25 metros de altura, al desplomarse sobre uno de los lugares más concurridos de la ciudad pudo haber significado una tragedia. Aunque la Municipalidad actuó con prontitud para asegurar el área, cortando la energía y desplegando equipos, la preg

El Divisadero

CNN Politics
NBC News