La gira de Lionel Messi por la India, pensada como un evento histórico para millones de fanáticos, comenzó de la peor manera. Lo que prometía ser un encuentro inolvidable con el capitán campeón del mundo terminó en un caos, enojo y una violencia que obligaron al ídolo a retirarse antes de lo previsto. Todo como parte de una desorganización total.
Desde temprano, el estadio Salt Lake de Calcuta, en el estado de Bengala Occidental, se colmó de hinchas que esperaban ver aunque fuera por unos minutos al 10 argentino. Messi fue recibido como una verdadera estrella: cantos, banderas y una euforia que reflejó el fenómeno que genera en el mundo entero. Sin embargo, esa expectativa se transformó rápidamente en frustración.
Según relataron medios locales, muchos de los espectadores no pudier

Revista Paparazzi Deportes

El Liberal
Diario El Sol
Ciudad Magazine
Infobae
Minuto Uno Espectáculos
El Patagónico
Diario Uno
ABC 7 Chicago Sports