El corazón de Fe y Alegría en Venezuela sigue latiendo a más de 700 kilómetros de Caracas, selva adentro del estado Delta Amacuro, más allá de donde llega el asfalto.
Hace más de 20 años comenzó a germinar la semilla educativa más sólida que ahora comienza a dar frutos. 260 indígenas waraos ven respetar su cultura mientras aprenden a leer y escribir en su propio idioma.
Ocho comunidades waraos en el Delta del Orinoco, a unas ocho horas por vía fluvial desde la ciudad más cercana, Tucupita, tienen acceso a una educación gratuita y de calidad, que, por encima de todo, respeta su propia cultura
Cuando el señor Alfonso Beria, de 65 años de edad comenzó a dar sus primeros pasos en la lectura y escritura en su comunidad Nayara, no pudo contener la sonrisa por un nuevo descubrimiento. Así como