Ni el sol canicular que por estos días arde en la ciudad ha detenido las labores de cerca de 60 trabajadores en una de las transformaciones históricas de la ciudad: la del barrio Obrero, que dejará de ser una zona envejecida y sostenida por la herencia cultural y emprendedora de sus habitantes, para convertirse en un sector patrimonial con un complejo musical alrededor de la salsa.
Aunque el reto es tenerlo listo para el mes de diciembre, desde la Alcaldía de Cali realizan esfuerzos para que pueda brillar a plenitud durante la Feria de Cali del 2025.
Hasta el momento, la obra, que hace parte de la estrategia ‘Invertir para crecer’, presenta avances globales del 11 por ciento, según el cronograma inicial.
Hay más de 6.000 personas que aún no han ido por sus pasaportes en el Valle del Cau