El 31 de agosto de 1990, en Berlín, se firma el histórico Tratado de Unificación entre la República Democrática Alemana (RDA) y la República Federal de Alemania (RFA) , marcando el inicio formal del proceso que culminaría con la reunificación del país el 3 de octubre del mismo año. Los principales negociadores, Wolfgang Schäuble por parte de la RFA y Günther Krause por la RDA, rubrican un documento de más de 900 páginas que regula la adhesión de los estados orientales al sistema político, jurídico y económico de Alemania Occidental. El tratado fue aprobado posteriormente por los parlamentos de ambas repúblicas, sellando el fin de la división impuesta tras la Segunda Guerra Mundial y declarando a Berlín como capital federal.
La firma del tratado fue el resultado de un intenso maratón de