Estamos viendo que la economía va funcionando y hay bastantes empresas que se plantean aprovechar el momento para cambiar de propietario. En muchos casos se trata de empresas familiares que no ven una sucesión clara del miembro de la familia que gestiona la empresa, que lo hace muy bien, pero que ya está en sus 70 y pico años de edad. Está en buena forma, pero él mismo reconoce que debe tener una sucesión pero no la ve en la familia. Es un caso conocido con un propietario y director que fue alumno en un programa hace ya bastantes años.

El propietario de la empresa la heredó de su padre que había empezado una empresa constructora no muy grande. La empresa tenía una plantilla con experiencia que se hacía cargo de los temas más complicados y una buena conexión con otras empresas constructora

See Full Page