“Ha sido una aventura loca”, afirma.
Nicole Urra se estaba preparando para ir a correr el maratón de Berlín, uno de los más importantes del mundo, y ya había pagado la inscripción. Pero ese plan voló por los aires cuando un día le habló José Camps, su entrenador, y le dio una noticia que ella no esperaba.
“Me llama y me dice de la nada: ‘Tranqui, Nico. Si no es Berlín es otro maratón mejor’. Yo en mi mente pensaba ¿qué maratón es mejor que Berlín? Le dije ‘bueno, tú sabrás’. Pasó como un mes. Me llama y me dice: ‘Nico, te tengo que contar algo. Clasificaste al Mundial de Tokio’. Yo estaba parada, me senté en el sillón. Pego el grito del año, empiezo a gritar por toda la casa. Estaban mis suegros y mi pololo presenciando todo ese momento . ‘No te puedo creer, pellízcame’, decía. Mi e