Este septiembre, la esperada Luna de Sangre coincidirá con un eclipse lunar total que transformará a la luna llena en un espectáculo rojizo visible en gran parte del planeta. El evento alcanzará su punto máximo la noche del 7 de septiembre y se prolongará durante 82 minutos, tiempo en el que el satélite natural mostrará un resplandor intenso que atraerá la atención de los observadores del cielo nocturno.
El fenómeno ocurre cuando la Tierra se interpone entre el Sol y la Luna, proyectando su sombra sobre la superficie lunar. Durante este proceso, la luz solar atraviesa la atmósfera terrestre y se dispersa: las longitudes de onda azules se desvían, mientras que las rojas y anaranjadas logran refractarse hasta la Luna, tiñéndola con el característico tono rojizo que da origen al