Una situación de desplazamiento forzado se vive en la zona rural del municipio de Anorí, Antioquia, donde al menos 64 personas, entre adultos y niños, se vieron obligadas a abandonar sus hogares.

La emergencia humanitaria se desató tras una semana de intensos combates entre grupos armados ilegales en la vereda La Liberia y el corregimiento Providencia.

El alcalde del municipio, Gustavo Silva, advirtió que no existen las condiciones de seguridad para que las familias retornen a sus casas. Según el mandatario, el riesgo no se limita solo a los enfrentamientos, sino que los grupos armados habrían instalado minas antipersonal en los caminos veredales, lo que impide la libre movilidad y aumenta el peligro para la población civil.

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