En agosto, el Pico Pobeda , en la frontera entre China y Kirguistán, fue escenario de varias tragedias entre alpinistas que intentaban alcanzar su cima de 7.439 metros. Se trata de la segunda más alta de la ex Unión Soviética y una de las mayores de Asia Central. La altitud extrema, el clima adverso y la dificultad técnica de la montaña complicaron cualquier intento de rescate.
La rusa Natalia Nagovitsyna quedó atrapada a 7.000 metros luego de romperse la pierna, y el italiano Luca Sinigaglia murió intentando socorrerla. Además, dos alpinistas iraníes desaparecieron y el reconocido montañista Nikolay Totmyanin murió tras descender del pico.
Los rescates se vuelven imposibles en un contexto en el que los helicópteros disponibles en la región son antiguos y carecen de tecn