El pasado 21 de agosto Colombia vivió una de los momentos más dolorosos para la Policía Nacional de los ultimos años, el asesinato de 13 uniformados en Amalfi, Antioquia, a manos de las disidencias de las Farc del frente 36, grupo actualmente sentado en la mesa de negociaciones con el Gobierno.

El ministro de Defensa, general Pedro Sánchez, reveló que el presidente Gustavo Petro ordenó un bombardeo inmediato contra los responsables, una medida que no se ejecutó debido a la topografía de la zona y la cercanía de viviendas, lo que habría generado un alto riesgo de daño colateral.

El ataque en Amalfi

Según Sánchez, los policías cumplían labores de erradicación de cultivos ilícitos cuando fueron emboscados. La aeronave en la que se movilizaban fue derribada por los insurgentes, pese a que l

See Full Page