
El Rayo Vallecano volverá a disputar una competición europea 24 años después tras superar en ronda eliminatoria al Neman Grodno bielorruso (5-0 en el global) y ya tienen rivales en la fase de grupos de la Conference League. Se medirán al Lech Poznan (Polonia), Drita (Kosovo) y Shkendija (Macedonia) a partir del próximo mes de octubre.
Sin embargo, la alegría es contenida porque aún no saben si podrán jugar en el Estadio de Vallecas, a la espera de que la UEFA confirme que el campo cumple todos los requisitos para autorizarlo como sede. Ni la entidad ni el cuerpo técnico esconden ese temor y trabajan en planes alternativos si finalmente no reciben el visto bueno.
“Hay runrún respecto a que no se pueda jugar en Vallecas la fase de liga de la Conference. Mi opinión es que si no jugáramos en Vallecas sería algo devastador para el grupo, para mí, para la afición y para todo el mundo”, admitió en rueda de prensa el técnico franjirrojo, Íñigo Pérez.
El técnico cree que “realmente no tiene ningún sentido no jugar en Vallecas ”, aunque admite que es su opinión y deberán esperar a la decisión de la UEFA: “Si luego vienen inspectores y nos dicen que hay ciertas normas y no se puede, pues habrá que jugar donde sea”.
La plantilla espera que el veredicto sea positivo y finalmente puedan vivir su vuelta a Europa en casa, donde ya se impusieron en el partido de vuelta de la eliminatoria al Neman Grodno bielorruso.
Dudas con Vallecas y plan B
Pérez prefiere ser optimista , pero admite que “hay runrún”. Ante este temor, la directiva se plantea mudarse para disputar la competición, según sostienen varios medios como la Cadena Ser . Las alternativas pasan por el Santiago Bernabéu, el Metropolitano y el estadio de Butarque. Todas en la Comunidad de Madrid.
De acuerdo con este medio, siguen habiendo numerosas deficiencias en el Estadio de Vallecas. Una de las principales: la falta de gradas para acoger a la afición visitante , que debe estar separada de la local. Tampoco se cumplirían algunas distancias entre, por ejemplo, línea de banda lateral y público.
Vallecas sigue en la cuerda floja pese a los trabajos realizados recientemente por la Comunidad de Madrid, que asegura haber cumplido el “compromiso de tener la primera fase de estas obras del estadio a tiempo”, habiendo renovado de forma integral sus dos cubiertas, reparando algunas fachadas, “reformando el interior de los aseos” y “mejorando los sistemas de climatización”.